La educación de la interioridad se compone de cinco partes, a modo de claves de bóveda , para construir un programa de Educación de la Interioridad que pueda tener un carácter estratégico.
En la primera parte se ofrece la reflexión teórica que ayuda a entender que la Educación de la Interioridad es un paradigma con sentido en sí mismo, para enseguida aclarar por qué a este modelo de trabajo se le denomina #aprender a ser cuidando el ser#.
Tras explicar en profundidad sus objetivos y metodología, Elena Andrés Suárez propone un despliegue del trabajo de la interioridad en tres fases, atendiendo a momentos importantes en el desarrollo del alumno.
Por último, se ofrece un material práctico constituido por varias sesiones para vivir con el claustro educativo, desde la convicción de que aquello que no vive el educador es muy difícil que llegue al alumno.