En Dios no se entra simplemente entrando. En Dios solo cabe Dios. Y solo Él puede arrancar de nosotros cuanto no es Él, iluminando lo que conocemos como noche espiritual.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información