La muerte está ahí, forma parte de nuestra vida y pienso que es
una de las realidades tapadas o no bien encajadas en nuestra
sociedad. Da la impresión de que la cultura actual trata de ocultarla
y sacarla del ámbito del día a día.
Deseo que estas páginas inviten, en primer lugar, a pensar y
reflexionar sobre la realidad de nuestra finitud. Que, ante la certeza
de que estamos de paso, podamos hacernos la pregunta: ¿Qué
pienso acerca de la muerte? Y en segundo lugar, considerando que
la fe cristiana tiene algo que decir en un diálogo sincero,
respetuoso y abierto con la cultura actual sobre la muerte y el morir,
preguntarnos si la fe en Jesucristo nos ayuda a ver la muerte como
la puerta que se abre hacia el más allá.
