Este libro pertenece al género de la enseñanza profética, un saber con intuiciones teológicas, pastorales y humanas que plantean a la luz de Jesús y su Evangelio nuevas formas de ser y quehacer para el pueblo de Dios en el mundo. La propuesta central del autor es una Iglesia sinodal, profética, esperanzada y esperanzadora, cada vez más centrada en Cristo Jesús. El auténtico encuentro con Cristo genera una Iglesia convertida a él y centrada en él. Pero no se puede vivir en Cristo sin ser signo de esperanza en las dimensiones de «pueblo de Dios esperanzado» y «esperanzador». Lo primero porque, centrada en Cristo, la Iglesia tiene la certeza de que la vida del Resucitado ha vencido a la muerte y al pecado; lo segundo porque se construye con parámetros evangélicos tales que los miembros de dicho pueblo viven y gestionan una realidad con vocación de trascendencia, es decir, llamada a la plenitud escatológica.