Hay libros de memorias que tienen el ritmo y la tensión de una novela
de aventuras. Si lo que nos cuentan no estuviera rigurosamente
documentado, parecerían más bien el guion trepidante de una película
de acción. Estas memorias hablan, además, de una de las figuras más
decisivas de la Iglesia contemporánea, san Josemaría Escrivá. Al hilo del
relato, Casciaro va presentando una galería de figuras inolvidables: sus
padres, algunos miembros del Opus Dei y tantos otros personajes del
Madrid de los años treinta, o de la guerra civil española, vista desde
ambos lados de la contienda.