La historia de Job, que se ha comentado, cantado y sufrido con inmensa pasión a lo largo de los siglos, nos devuelve al mundo de los miedos y los sueños ancestrales dentro de una trama existencial de tipo mitológico en la que un Dios supra-poderoso le acompaña en su travesía de víctima. Su lectura nos confronta con el dolor de los seres humanos, pero también con la certeza de que Dios no se demuestra ni se impone, sino que se revela en el silencio atronador de la tormenta. Su libro no es solo para cristianos y judíos, ni su final está resuelto desde fuera, sino que es un relato al que podemos volver todos en estos tiempos duros, como hace Xabier Pikaza, para descubrir que Dios nos ama y camina con nosotros, de un modo distinto al que han querido imponernos cientos de predicadores antiguos y modernos.