Desde hace ya algunos años la simbología de carácter religioso ha sido un tema
constante en los países de nuestro entorno. Lo que en otras épocas no pasaba
de ser una anécdota, con el comienzo del siglo XXI se ha hecho habitual y reclama
la atención de políticos y juristas. El Derecho se ha encontrado con un fi lón de problemas
prácticos a nivel nacional, regional e internacional. La complejidad de la
materia, la disparidad de supuestos que se han planteado y que se plantearán,
la importancia del estudio comparativo de este tema, permiten afi rmar que estamos
ante una especialidad de estudio jurídico académico. Este trabajo se fundamenta en
tres elementos básicos de estudio. El primer de ellos es el concepto y morfología del
símbolo religioso. Los otros dos elementos de estudio atienden al contexto en el que
el símbolo se presenta: el espacio físico o inmaterial, por un lado, y las personas
portadoras de los símbolos religiosos, por otro.