Nunca antes en la historia se había debatido tanto sobre el
cambio como en la actualidad. Pero rara vez se ha reflexionado
sobre qué significa exactamente «evolución» en un sentido
teológico.
El hecho de que ni siquiera los dogmas se sustraigan al devenir y
al cambio puede resultar escandaloso para unos. Y también
liberador para otros. Michael Seewald no rehúye de esta provocación
de la naturaleza dogmática, para conseguir narrar la desconocida
pero llamativa historia de las teorías de la evolución del
dogma. Un recorrido desde los inicios del cristianismo hasta el
presente, en el que podremos descubrir que el margen para el
cambio y la reforma en la Iglesia, es mayor de lo que solemos
pensar.