En este libro encontrarás siete historias de mujeres
que se han convertido en diamantes tallados
porque los golpes de la vida han logrado hacer de
ellas, por la guía experta de la mano divina, una
joya maravillosa.
Viven una vida sencilla, serena y reconciliada
con su pasado. Sus heridas son luminosas. Se han
convertido en destellos de luz como los diamantes
que, formados por carbono, recogen la luz y la
emiten en brillos espléndidos. Ellas mismas son un
faro de esperanza, un resplandor en la oscuridad.
No encontraremos biografías ni testimonios,
sino unas «confesiones» al estilo de san Agustín.
En estas páginas verás la crudeza del pecado del
mundo, la gravedad de la oscuridad y, por supuesto,
la salvación de Dios. Pero hace falta descubrir la
acción del Espíritu a través de estas vidas heridas,
en medio de la depravación, en aquellas «periferias
» que no nos gusta contemplar, para encontrar,
insospechadamente, diamantes tallados.