Santa Teresa escribió el libro de las Fundaciones en plena madurez, a lo largo de los últimos diez años de su vida. Comenzando en Salamanca 1573 y terminado en Burgos 1582 y terminado en Burgos 1582, el libro vajalonando t reviviendo las jornadas y los ideales de la Madre Fundadora. Una fuerza motriz interior, o trascendente, la pone y la mantiene en cuanto, ora sea dentro del carromato ariero, ora a lomo del borrico.