LE BOURHIS, ANNE MARIE / BENOÎT, PERE
«Viens, suis-moi» (Ven, sígueme) no es una catequesis al uso. Aunque
incluye la preparación a los sacramentos de iniciación cristiana, no se limita
a ello. Es mucho más. Es un camino para la catequesis. Un camino de vida
cristiana, que se adapta pedagógicamente a la edad del niño en cada
momento y, dentro del cual, naturalmente, se incorpora la recepción de los
sacramentos. Así, para conducir al niño a la comunión, a la intimidad con
Cristo (Catechesi Tradendae, 5), ofrece una catequesis de inspiración
catecumenal, kerigmática y mistagógica, como pide el reciente Directorio
para la Catequesis (2020). En este primer nivel se comienza la catequesis
de iniciación cristiana. Acompañando al despertar de la razón, se nutre la
inteligencia del niño con los contenidos de la fe de un modo elemental pero
íntegro. Puesto que a esta edad el niño se vuelve consciente de su
responsabilidad y de sus límites (y, por tanto, de su pecado), todo el curso
tiene como telón de fondo el anuncio de la misericordia divina. En el orden
sacramental, su orientación ayuda a preparar la recepción del sacramento de
la Reconciliación.