Los avances científicos y sociales con implicaciones bioéticas van tan rápido que esta ciencia dedica sus mejores esfuerzos a dar respuesta a los interrogantes que van surgiendo, de manera que suele faltar tiempo para una reflexión serena sobre sí misma. Sin embargo, este esfuerzo es muy necesario, pues poder agrupar de forma coherente los modelos bioéticos permitirá descubrir la razón última de las divergencias y avanzar hacia una bioética con pretensión de universalidad.
En este libro, además de explorar algunas de esas taxonomías, normalmente apoyadas en la ética o en la antropología, se aporta una nueva perspectiva que ayuda a superar los límites de estas opciones, por lo general más pasionales que racionales. Así, se utiliza la filosofía de la biología y, en concreto, el concepto vida.
Los autores más destacados de la bioética se clasifican en tres grandes grupos, lo que da como resultado una taxonomía coherente de modelos bioéticos que es capaz de explicar las semejanzas en las respuestas en torno a los problemas del inicio y final de la vida, o en cuanto a la relación con otras formas de vida, y que da razón de las diferencias entre autores y corrientes de los distintos modelos bioéticos