Un testimonio conmovedor. El autor se entera de que
padece un cáncer grave en 2015, una noticia que le
ilumina para escribir un diario sincero con el que trata
de ayudar al lector a vivir más auténticamente. Aquí
reflexiona sobre la fe en la actualidad y cómo hacer
la fe cristiana atractiva y comprensible para nuestros
contemporáneos. Vive la última etapa de su vida
dialogando desde el corazón con los que no tienen
fe, hablando con palabras llanas de cómo se siente y
reflexionando sobre su espera cuando se ve cercano
el abrazo definitivo con quien ha dado sentido a toda
su vida.