Las últimas palabras de Jesús en la cruz tradicionalmente
han sido para los cristianos una invitación a meditar y
vivir profundamente el Viernes Santo los momentos finales
de la vida de Cristo. Estos siete últimos mensajes han
permitido a James Martin acercarnos a un sorprendente
retrato del Jesús crucificado, que muestra hasta qué punto
Dios es capaz de comprender nuestras dificultades.
Las Siete Palabras son el mejor reflejo de ese Dios hecho
ser humano. Un Jesús que hasta su misma muerte empatiza
con las alegrías y las penas. Acogedor de esperanzas
e ilusiones. Y también de nuestros miedos y angustias.