En el lenguaje metafórico del tándem Lennon-McCartney a finales de 1966, por un penique de fresas acaso significaría por amor al arte, sentir que llevó a quien suscribe, cinco décadas después, a ahondar hasta el límite en dos canciones que marcaron la transición estilística del cuarteto de Liverpool: Strawberry Fields Forever y Penny Lane.
Mientras pertenece al dominio público el que John fraguase la primera composición en Almería, se ignora por completo que Paul lo hacía con la segunda al atravesar Andalucía y arribar a Sevilla, en un malogrado intento de reunirse con su compañero y embebido así mismo del folclore de la región. Bajo la perspectiva de un experimentado intérprete viajero, original y replicante, el autor ha recuperado en este libro la otra parte de la historia, identificando la semilla española del disco que cambió a Los Beatles, con sus vivencias personales, los testimonios de numerosos implicados y una copiosa información antes inédita.
Strawberry Fields Forever y Penny Lane conforman un single indivisible, que definió un momento coyuntural en la andadura artística de la banda más popular del planeta. Un vinilo con tenue sabor andaluz, al que jamás se le ha dedicado tanto en una sola obra.