NGUYÊN VAN THÛAN, FRANÇOIS-XAVIER
Solo la hondura cordial, la experiencia de Dios y de la vida, y la capacidad de comunicación del Cardenal Van Thuan, podían brindarnos una explicación del Evangelio tan sencilla y honda al mismo tiempo. Páginas que bro-taron tímidas en las cárceles de Vietnam y que hoy se leen en el mundo entero.