¿Por qué? Una pregunta frecuente de hijos a padres que aquí el autor, experto en el análisis narrativo de los textos bíblicos, pretende guiar en su respuesta.Especialmente si esta pregunta se refiere a Dios o la vida de fe. Sonnet está convencido de que este encuentro entre padres e hijos propicia un diálogo especial. Una relación donddee las respuestas de los padres son fuentes de formación y de educación. En este diálogo se genera ese vínculo íntimo entre el misterio de Dios y la cadena de las generaciones, como si Dios fuese el testigo que se va pasando de una generación a otra, y el custodio de esta realidad gfascinante que es el engendrar.
