Una emotiva y sobrecogedora novela sobre la búsqueda de sus orígenes de un niño "robado". Carlos Miranda tiene 40 años, es creativo de publicidad y goza de un gran éxito personal y profesional, pero no sabe quién es. A esa edad descubre que sus padres, que le criaron con todo lujo de comodidades, en realidad no eran sus progenitores ya que le compraron al nacer en un ilegal y dudoso procedimiento de adopción donde un médico, una monja y un taxista fueron cómplices necesarios. Cuarenta años antes, en una casa cuna de la provincia de Valladolid, María Dolores González es una joven de 17 años soltera y sin pareja conocida, que da a luz un bebé.