¿Heroínas cotidianas? ¿Madres coraje? ¿Superwomen....?
He aquí, en estas páginas, siete testimonios inéditos tan
conmovedores como admirables. Sonia tiene cinco hijos nacidos
por cesárea y, pese a padecer una enfermedad crónica, es feliz de
verdad. Mar alumbró a doce hijos y conoce los entresijos de una
familia numerosa mejor que el pasillo de su casa. Mónica cayó en el
engaño del aborto, pero ahora ha vuelto a nacer. Lydia sufrió una
dolorosa enfermedad y la muerte de un hijo, pero eso no le impide
hoy dar gracias a Dios por cada día, convertida en una auténtica
paradoja humana.
Atrapada en una depresión, Majo se quedó embarazada de su
quinto hijo y, lo mismo que Lydia, es incapaz ya de vivir sin Dios.
Myriam es madre de cinco hijos, dos de ellos prematuros extremos
y con parálisis cerebral, pero eso tampoco le impide experimentar
la felicidad. Amparo, por último, tras dar a luz a tres hijos, adoptó a
un niño con síndrome de Down que constituye hoy la alegría de la
casa. Todas ellas son madres unidas por el sufrimiento, pero
dichosas de verdad.