IBARROLA LÓPEZ DE DAVAVILLO, BEGOÑA
Adela es una niña inquieta e impulsiva.
Un día conoce a Nora, su vecina
del ático, una mujer muy especial
que se dedica a la pintura. Su
relación con ella le ayudará a desarrollar
la capacidad de atención y la
paciencia, mientras va descubriendo
que aprender a pintar no es algo tan
fácil como imaginaba. Cuando se ha
ganado su confianza, Nora la hace
cómplice de un gran secreto.