Hasta hace algunas décadas los religiosos y las religiosas ocupaban
todo el espacio que tenía que ver con la vivencia y presencia del carisma.
Ellos y ellas asumían personalmente todos los lugares en las obras y mediaciones
de la misión. No era necesario preocuparse por la transmisión
de la tradición, esta se producía por ósmosis. Todo emanaba de las propias
estructuras internas de la institución.
Hoy la situación ha cambiado aunque el proceso haya sido progresivo
y paulatino. Es evidente que un escenario está muriendo. Desde la fe estamos
impelidos a rastrear lo que está naciendo. En torno a los religiosos
y las religiosas están surgiendo nuevas realidades: movimientos de misión
compartida, nuevas estructuras de gobierno de las obras apostólicas, etc..
La pregunta se impone: ¿Hemos tomado conciencia de verdad del nuevo
escenario? ¿Nos hemos planteado cómo debemos ejercer nuestra responsabilidad
de gestión sobre todo este nuevo entramado? ¿Seguimos
pensando que nuestros modos y maneras de dirigir son capaces de responder
a estos nuevos retos?
El modelo de liderazgo constituye hoy un paradigma universal de una
buena gobernanza. Desde esta convicción teórica y sobre todo práctica
por la experiencia vital del autor, se nos propone una profunda reflexión
sobre toda la realidad que un responsable de institución de vida religiosa
debe dirigir hoy, y una reflexión orientada a la práctica de cómo el paradigma
del liderazgo puede venir en nuestra ayuda.
Javier Cortés ha dedicado su vida al compromiso educativo desde
diferentes plataformas: como profesor, como director, como editor de materiales
educativos, como director general y presidente de Grupo Editorial
SM, etc. Participa activamente en la formación del profesorado en especial
en el ámbito de la función directiva. Ha publicado junto con Jesús Ángel
Viguera Gestionar para educar una reflexión sobre los mejores modos de
liderazgo en la dirección de los centros educativos y La Escuela Católica
una reflexión programática sobre la escuela católica.