París, invierno de 1943. La Ciudad de la Luz se ha convertido
en la ciudad de las sombras. París vive un largo
y frío invierno que parece no tener fin. En sus calles y
bulevares, antes alegres y bulliciosos, proliferan los uniformes
alemanes, los controles de la policía y las redadas
de la Gestapo. La ocupación ha convertido a París en una
ciudad triste y silenciosa, pero repleta de cabarets y prostíbulos
destinados al recreo y entretenimiento del invasor.
Solo los colaboracionistas, los conocidos collabos, parecen
disfrutar de la presencia alemana en sus calles, como si
nada hubiese ocurrido.
En una lujosa habitación del hotel Ritz, una carismática
diseñadora de alta costura, aburrida y cansada de presenciar
tanta miseria y tanto dolor, decide poner fin a la
guerra.