La hora crítica de jubilarse le ha llegado al narrador, Mario, un neurólogo que se ha implicado tanto en su trabajo que lo que abandona es una forma de vivir. La misma mañana que empaqueta las pertenencias recibe la inesperada visita de su "nieto sobrino", estudiante de medicina. Este, joven e impulsivo, le ayuda en la mudanza mientras le incita a hablar, a recordar, en un diálogo que es, a la vez, balance, recuento y manual de vida.