La infanta nació entre los algodones y las puntillas del Palacio Real de Madrid en 1862. Según los mentideros de la corte, fruto de la relación de la reina Isabel II con su secretario Miguel Tenorio de Castilla. Vivió el exilio en París cuando su madre se vio obligada a renunciar al trono. Regresó a España su hermano Alfonso XII, pero pronto volvió a partir, esta vez para siempre, al contraer matrimonio con el príncipe Luis Fernando, del que estuvo profundamente enamorada hasta el final de sus días y con el que vivió en la Baviera romántica y extravagante del rey Luis II. María Teresa Alvarez recrea con emoción la apasionante vida de una mujer irrepetible.