Hija de un afamado botánico audaz y carismático, Alma está destinada a seguir los pasos de su padre. Niña independiente y con una sed de conocimientos insaciable, no tarda en adentrarse en el mundo de las plantas y de la ciencia. Sin embargo, a medida que se va acercando a los misterios de la evolución, el hombre al que ama la arrastra en la dirección opuesta: al mundo de lo espiritual, lo divino y lo mágico. Ella es una científica de mente despejada; él es un artista utópico. Pero lo que une a esta pareja es la pasión compartida por el saber: el desesperado deseo de comprender cómo funciona el mundo, de qué están hechos los mecanismos de la vida.