La Fiesta de la Candelaria nos evoca el momento en el que María y José,
cumpliendo la Ley de Israel, llevan a Jesús al templo para presentarlo al Señor.
Allí es recibido por los ancianos Simeón y Ana, que lo reconocen como Mesías
y luz de las naciones. María, con su hijo en brazos, lleva esta luz al mundo
entero.