JOSE MANUEL FIDALGO ALAIZ Y JOSE MORALES
La fe supera la razón pero no la elimina. La inteligencia
humana, guiada por la Revelación de Dios, entra en el mundo de
los misterios sobrenaturales en busca de claridad y sentido. Aceptar
los misterios de Dios impulsa a investigarlos con respeto y a
descubrir en ellos horizontes
insospechados de racionalidad. La teología es ciencia de la fe.
Trata de comprender mejor los misterios revelados por Dios y
exponerlos de manera
sistemática y ordenada, basándose en la Sagrada Escritura y la
Tradición, con la guía del Magisterio. La teología cristiana no
procede de la simple
curiosidad intelectual. Es pasión del creyente que quiere conocer a
Dios en profundidad. Es una ciencia de salvación, que debe en
último término ayudar al ser humano a conseguir su destino eterno.