Este libro cuenta la historia de las apariciones de Fátima tratando de mantener fija la atención
principalmente en su protagonista, la Virgen María. El 13 mayo de 1917, la Madre de Dios cruzó los límites
entre el cielo y la tierra para hablar con tres niños portugueses. Se presentó en toda su belleza
resplandeciente, la que realmente tiene en el Paraíso, en cuerpo y alma. Empezó un diálogo con los
pequeños confiándoles informaciones, recomendaciones, consejos, deseos, para que fueran transmitidos
a toda la humanidad, de la que María es la verdadera Madre. Con sus palabras, sus preocupaciones, sus
deseos, su manera de hacer ha revelado un amor maternal tan concreto, tan apasionado que los seres
humanos podemos definir como impactante. Y desde entonces, ese amor no ha dejado de manifestarlo
de mil maneras, a través de un sinfín de actividades, iniciativas, intervenciones, porque ese viaje, iniciado
hace cien años, aún no ha terminado.