Resulta difícil no emocionarse varias veces al sumergirse en esta narración. A medio camino entre la novela de aventuras y el relato autobiográfico, la presente historia la escribió la autora para dar a conocer a sus descendientes los beneficios con los que Dios colmó a su familia: «beneficios amargos, sin duda, pero preciosos a la vez». El conmovedor testimonio de Sainte-Hèrmine nos muestra el Terror de la Revolución francesa. Con crudeza y realismo, la protagonista relata el primer genocidio moderno: la guerra de la Vandée. Allí, unos pocos «bandidos» ?campesinos y nobles? bordaron en sus camisas el Sagrado Corazón de Jesús y una divisa antigua: «Dios, el rey». Este libro es la terrible historia de una familia de aquellos memorables «bandidos»