A medida que vaya avanzando en su lectura no resultará difícil al lector vislumbrar el hilo que entreteje la presente recopilación de artículos, a primera vista muy dispares, que vio la luz en 1974, año que será también el del fallecimiento de su autor. Pero antes de comenzar su lectura, tanto título como índice le habrán permitido constatar que esta obra no constituye, como lo han sido otros de sus libros, un ensayo pormenorizado dedicado a una determinada doctrina tradicional o una exposición relativa a la actitud existencial a adoptar ante un mundo cuya trama se va disgregando con el transcurso del tiempo. Porque, en efecto, estas exploraciones, estos reconocimientos en territorios en parte enemigos, en parte amigos y en parte grises -zonas intermedias-, prestas a ser ocupadas por unos u otros, son en verdad admoniciones, planteamientos de ideas, sugerencias de caminos a tomar o tentativas de prevenir extravíos a quienes han ido a solicitar guía y consejo a su autor. Son, en definitiva, pues así lo muestran con claridad tonos y contenidos, escritos seleccionados o redactados muy especialmente para creyen