Tras la muerte de su hermana Helena y de su hijo de seis años, Inés dejará su Menorca natal y se trasladará a Copenhague como corresponsal del periódico para el que trabaja, donde vivirá aislada y consumida por el dolor. Un año más tarde, Bea, su hermana pequeña, viaja a Copenhague junto a su hija de pocos meses con la misi n encomendada por Mencía, la abuela de ambas, de rescatar a Inés de su dolor y hacerla regresar a Menorca con su familia.