La Guardia Civil reveló que el comisionista Víctor de Aldama se refería a Pedro Sánchez en sus conversaciones como «el 1». Esta es la historia de un conjunto de tramas directamente vinculadas con el líder socialista, el verdadero número 1 en la deriva de un Gobierno. Una avalancha de datos contrastados por la investigación periodística y la instrucción judicial está cercando a dirigentes del PSOE, altos cargos del Gobierno, amigos y familiares de Pedro Sánchez. Y aunque la corrupción o el abuso de poder no son una novedad de la política española, sí lo es el ataque frontal de Sánchez y sus socios a las instituciones democráticas, especialmente a dos contrapoderes esenciales como la Justicia y la Prensa. Mientras Sánchez agita el fantasma de la extrema derecha y su insostenible relato de muros o fango, determinados sectores de la oposición insisten en su división, sin tomar verdadera conciencia del avance socialista en el control de organismos como la Fiscalía General del Estado o el Tribunal Constitucional. Carlos Cuesta documenta al detalle la trama Ábalos-Koldo-Aldama, los negocios de Begoña Gómez o la colocación de David Azagra; también las conexiones con el régimen venezolano o la opacidad en el acercamiento a Marruecos; las campañas contra jueces, periodistas y rivales como Isabel Díaz Ayuso, así como las graves cesiones al separatismo que nos abocan a un Estado fallido y una nación quebrada. Un panorama preocupante que exige una ciudadanía más concienciada que nunca.