El hombre de las dos patrias narra un viaje del autor por Argelia tras las huellas de Albert Camus, uno de sus escritores favoritos. El libro transmite la belleza extraña de Argel y Orán, con ese sol cegador que el lector casi siente sobre la piel según pasa las páginas, y reúne todos los elementos que tanto gustan a los muchos lectores de Reverte: la descripción de los paisajes y el carácter de las ciudades, el amor por la literatura, la narración histórica y el anecdotario viajero, con un personal punto de humor.