El discernimiento es, en primer lugar, una manera de proceder en la vida
siguiendo la voz del Espíritu; quiere decir centrarse en las ocasiones o los
ámbitos en que experimentamos la duda, la incertidumbre, el esfuerzo por
entender lo que hay que hacer, la dirección que tomar para dar el siguiente
paso, tanto si se trata de las grandes decisiones de la vida como de las
múltiples opciones que orientan nuestro estilo de vida. Las incertidumbres no
afectan solo la vida personal, sino también la social, la eclesial y la política:
no faltan ámbitos controvertidos. Evangelii gaudium describe su proceso con
tres verbos: reconocer, interpretar y elegir; vividos en un clima de profunda
escucha interior, estos tres pasos perfilan un estilo tanto para cada uno
como para los grupos, las comunidades, las instituciones. En los últimos
años, el papa Francisco está invitando a crecer en este estilo arraigado en la
Palabra de Dios y en toda la tradición cristiana, de los Padres de la Iglesia
hasta el Concilio Vaticano II. El objetivo de este libro es proponer algunas
ideas para dar a entender al lector, de manera orgánica no sistemática- que
hay en juego diversas declinaciones de esta palabra clave del estilo y el
magisterio del Papa. Al mismo tiempo, se destacan algunas articulaciones
teológicas subyacentes a la práctica del discernimiento, de la teología moral,
a la eclesiología, a la teología fundamental.