Sin lugar a dudas, El Cantar de los Cantares es uno de los más hermosos poemas de amor de la literatura universal y su interpretación religiosa y alegórica ha motivado multitud de estudios de la tradición exegética judía y cristiana. No es seguro que su interpretación alegórica fuera anterior a su incorporación a los libros de la Biblia. Del Rabí Akiba ha llegado hasta nosotros una aguda afirmación: «Todas las escrituras son sagradas, pero El Cantar de los Cantares es la más sagrada de todas». En nuestra época se ha ido imponiendo, como indica Rolf Rendtorff, que se trata de canciones de amor probablemente para celebraciones de matrimonio. De todas formas, divino o humano, lo que resplandece en el poema es un paisaje de índole pastoril en el que se canta, de la manera más inspirada, el Amor que convierte lo divino en humano y lo humano en divino por alcanzar los más altos niveles de la Poesía.