Dios te quiere más y mejor de lo que tú te quieres a ti mismo. Su voluntad
hacia ti coincide con tu felicidad. El gran engaño consiste en buscar la
felicidad al margen de la voluntad de Dios, quien tiene un plan personal de
amor para ti que estás llamado a descubrir. Para ello, la clave fundamental
está en vivir en la presencia de Dios, permaneciendo abierto a su voluntad,
sin ningún tipo de miedo, al modo en que la aguja de una brújula nos orienta
para descubrir el camino correcto.
Tú mira hacia adelante, mira hacia Jesús, y deja que Él ilumine tu camino.
Lo importante no es lo que tú has soñado, sino lo que Dios ha soñado
para ti. El sueño de Dios es que tú seas santo y Él tiene un camino para que
ese sueño se haga realidad. Ya lo descubrirás. Tú estate atento y confía,
sabiendo que Dios te quiere
que Dios te quiere feliz
que Dios te quiere
santo
Te invito a adentrarte en estas páginas, pero sobre todo, te invito a profundizar
en esta gran verdad, llena de bondad y belleza.