FERNÁNDEZ-MARTOS SJ, JOSÉ MARÍA
El libro va de entreverados confines, innata desmesura humana que nos empuja a reventar nuestras costuras de mil maneras: investigando, soñando o, más triste aún, resignándonos en la angostura del pequeño huerto conocido, vendando el corazón. ¿Habrá horizontes más allá del televisor, la pantalla del ordenador o la tableta? Escrito por un psicólogo, no faltarán pistas para conocernos y... ¿sanarnos? Aun así, tan ancestral enfermedad del "seréis como dioses" y la tentadora manzana no se curó con trabajos ni partos dolorosos. Jesús quiso moderarnos con sus Bienaventuranzas, que no pudimos escuchar porque ese día estábamos distraídos.