El autor nos invita a volver a las fuentes de nuestra vida cristiana y beber
abundantemente de ella: la vida de Cristo celebrada en sus misterios a lo
largo del año litúrgico a partir de la Palabra de Dios. El autor analiza los mil
matices que la liturgia renovada tiene y sugiere a partir del comentario a las
lecturas, leídas y proclamadas en la celebración de la misa en Adviento y
Navidad. Es un comentario bíblico con algunas referencias eucológicas que
nos acercan al sentido espiritual de la liturgia.