"El Evangelio fue primero predicado y después, por voluntad de Dios, fue puesto por escrito". Estas
palbras de Ireneo de Lyon (Adv. haereses 3,1,1) transmiten la convicción de la Iglesia primitiva. Después
de que la Iglesia apótolica ha predicado la "Buena nueva", los escritores sagrados, movidos por las
circunstancias, se decicieron a poner por escrito el contenido de la predicación. Este ha sido el punto de
partida de este libro, que busca explicar el origen y el desarrollo de la tradición apotólica. Autor: Bernardo
Estrada Barbier (Frontino, Colobia. 1950) esprofesor ordinario de Teología Bíblica en la Pontificia
Universidad de la Santa Cruz, Roma. Ieniero Químico (Bogotá, 1973) y en Filología Bíblica Trilingüe
(Salamanca, 1993). Entre sus publicaciones están El Sembrador.