Hasta el final de los tiempos, hombres y mujeres elevarán a Dios su corazón y sus
labios recitando las invocaciones de la Letanía Lauretana a Santa María: «Me llamarán
bienaventurada todas las generaciones» (Lc 1, 48). Este libro, movido por la fe y sostenido
por la devoción, recoge y explica los «piropos encendidos» con los que desde hace
siglos los cristianos han querido llamar a su Madre.