"Vuestra prfesión de vida es, como bien lo sabéis la más elevada; porque, mientras el fin de los demás hombres es conocer, amar y reverenciar a Dios, el vuestro es -en cuanto posible en esta vida mortal- gustar de Dios y gozar de aquella suavidad que es imagen y anticipo de la felicidad del cielo". (Pío XII: 4-8-1956).